Matar el «gusanillo» que en ocasiones tenemos cuando llevamos días sin salir a fotografiar te lleva a localizaciones conocidas, muchas veces visitadas, próximas a nuestra residencia y que sin embargo no por ello no sólo no dejan de ser interesantes, si no que además te obligan a que busques y escudriñes nuevos ángulos encontrando en ocasiones elementos que te habían pasado desapercibidos. Os dejo diferentes instantes de una pequeño atolón rocoso que atrajo mi atención en el último fin de semana.
El «gusanillo» que nos azuza
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De los lugares que visitamos y conocemos es donde podemos sacar el máximo provecho. Pero además…si no fuese por estos momentos y estos lugares ¿cómo cargaríamos las pilas?
Interesantes las distintas luces que has captado. La segunda tiene un cielo precioso. Y comparto con vosotros que cerca de casa tenemos estupendos motivos para inspirarnos.